Banxico envía tres alertas al Gobierno de López Obrador

 

El Banco de México emitió tres alertas al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador dentro de su comunicado de política monetaria, en el que anunció una nueva alza a la tasa de interés.

El Banco Central aumentó en 25 puntos base el referencial, a 8.25 por ciento, igualando el máximo nivel de la historia.

La primera alerta que emitió el Instituto dirigido por Alejandro Díaz de León para el próximo Gobierno es que “es particularmente relevante que” se cumplan las metas fiscales que se incluyen en el Paquete Económico de 2019.

SUPERÁVIT PRIMARIO

La Secretaría de Hacienda entregó un presupuesto con un superávit primario del 1 por ciento, lo que fue bien recibido por los mercados, y cumplirlo será clave para que el país mantenga su calificación crediticia.

“Es importante seguir una política monetaria prudente y firme, se impulse la adopción de medidas que propicien un ambiente de confianza y certidumbre para la inversión, una mayor productividad y que se consoliden sosteniblemente las finanzas públicas, reforzando la transparencia y la rendición de cuentas”, detalló el Banco.

La segunda alerta fue la inflación, ya que el Banco Central señaló que las expectativas para 2019 han aumento, y de hecho su pronóstico está por encima de lo que la Secretaría de Hacienda prevé en el Paquete Económico.

Para el cierre de 2019 los estimados se incrementaron de 3.71% a 3.89% entre octubre y diciembre, explicó el Banxico. Hacienda previó una inflación de 3.4 por ciento para el fin del próximo año.

“La inflación enfrenta riesgos de carácter estructural derivados de la posible adopción de políticas que pudieran conducir a cambios profundos en el proceso de formación de precios en la economía”, detalló el Banco.

ALZA SALARIAL

En tercer lugar, el Instituto Central alertó por la anunciada alza al salario mínimo de 16 por ciento a nivel general y de 100 por ciento en los municipios fronterizos.

“Considerando la magnitud de los aumentos recientes en el salario mínimo, además de su posible impacto directo, se enfrenta el riesgo de que éstos propicien revisiones salariales que rebasen las ganancias en productividad y generen presiones de costos con afectaciones en el empleo formal y en los precios”.

Para elevar de manera sostenida el poder adquisitivo de los salarios es necesario considerar el papel de otras políticas públicas, en particular fomentar la competencia en aquellos sectores de bienes y servicios con una participación elevada en la canasta de consumo de los segmentos de la población de menores ingresos.

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