EU se prepara para una guerra nuclear contra China, según Rand

guerraFoto: geopolitico.es

 

Alfredo Jalife-Rahme (Bajo la Lupa)

Los logros de Obama fueron sus convenios con Irán, Cuba y el etéreo Acuerdo de París sobre el cambio climático, al unísono de su recuperación neoliberal de Brasil y Argentina, y su fagocitosis del México neoliberal itamita al esquema geoeconómico de Norteamérica: fusión de EU, Canadá y México, pero sin mexicanos.

 

Los resonantes fracasos de Obama, asesorado por Brzezinski y muy cercano al megaespeculador George Soros, abrieron llagas en Ucrania, Siria/Irak, en los mundos árabe e islámico y en el Mar del Sur de China.

 

El belicismo estadunidense no tiene límites.Nada menos que Robert Gates (RG), quien se jacta de haber servido con ocho presidentes en más de 50 años y de haber sido el secretario del Pentágono con Baby Bush y Obama, define sin rubor los desafíos que enfrenta EU –contra China, Rusia, Norcorea e Irán– y que pueden (sic) requerir el uso de los militares de EU, el país más poderoso que el mundo haya conocido y que tiene a 2 millones en uniforme. RG reconoce que la delicada coyuntura del mundo, cada vez más peligroso y complejo, está peor que hace ocho años (https://goo.gl/7Yk9b3)”.

 

El Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS, por sus siglas en inglés), donde coinciden los súper halcones Kissinger y Brzezinski, publicó un estudio a finales de julio: Las fuerzas nucleares de China y sus armas de destrucción masiva (https://goo.gl/3B0xHo),que distorsiona a China como monstruo nuclear frente al sufrido EU –¡Pekín, con 300 bombas nucleares frente a 7 mil 700 de Washington!– en aplicación de la técnica Hasbara, que infló las inexistentes bombas nucleares de Irán frente al también sufrido Israel, que posee más de 200 bombas atómicas clandestinas. ¡A ver quién desinforma más!

 

EU es el único país que ha lanzado dos bombas nucleares sobre poblaciones civiles: Hiroshima y Nagasaki (https://goo.gl/iUv9d0).

 

A propósito de bombas nucleares, Rand publicó un perturbador estudio comisionado por el ejército de EU: guerra con China. Pensar lo impensable (https://goo.gl/OJ2eDF)”.

 

La espeluznante alegoría pensar lo impensable fue acuñada en la década de los 50 por Herman Kahn, principal estratega de Rand, que se basó en su horripilante libro Sobre la guerra termonuclear (https://goo.gl/goe7Ze), en el que alucinó una estrategia para una guerra nuclear victoriosa contra la URSS.

 

Sin bombas nucleares de por medio y con una diplomacia estratégica de largo alcance, George Kennan, el incomensurable geoestratega de EU sin muchos reflectores, consiguió disolver el imperio soviético mediante su política de contención.

 

No obstante sus elusivos triunfos diplomáticos, hoy EU se obstina en librar de nueva cuenta, al menos que se trate de un deliberado bluff, una guerra nuclear, esta vez contra China.

 

El estudio de Rand sopesa clásicos juegos de guerra y los probables resultados de una guerra nuclear entre EU y China, pero peca de supuestos equivocados que confinan tal macabro escenario a EU y China, dejando de brazos cruzados a Rusia (y sus 8 mil 500 bombas atómicas) y, peor aún, limitado al área del este de Asia, que implicaría las 15 bombas atómicas de Norcorea.

 

Se incrementa la probabilidad de una confrontación entre EU y China, que está llegando a su paroxismo tanto en el Mar del Sur de China como en el Mar Meridional de China, conforme se derrumban los esquemas geo-mercantilistas de Obama: el TTIP, repudiado en Europa; el ATP desmoronándose (https://goo.gl/21LmhB), y el TLCAN, cada vez más increpado por la furia de desempleados blancos que se han volcado por la demagogia de Trump.

 

Hasta el alucinógeno pivote de Obama en Asia (https://goo.gl/64vbjC), diseñado para contener a China, se está desplomando.

 

Rand aborda cuatro escenarios lineales/maniqueos/simplones, a los que no hubiera llegado siquiera la medieval navaja empírica de Ockham del siglo XIII, que enarbola mediante dos variables: 1. La intensidad, subdividida en leve (sic) y severa, y 2. La duración: desde pocos días a un año o más. Cuanto más pronto será mejor para EU librar la guerra contra China, ya que los avances en la tecnología militar no le favorecerán en los próximos nueve años, como ahora.

 

En última instancia, Rand se inclina en sus hallazgos por un conflicto severo, sea breve o extendido, cuando el impacto económico y militar que sufriría China sería mayor. Para 2020, la planificación militar de EU contempla mantener 60 por ciento de todos sus activos aéreos y navales en la región indo-Pacífico, mientras que para sus propósitos bélicos de someter a China, EU prepara su clásica panoplia bélica de corte goebbeliano mezclado con la técnica Hasbara de Israel, con el fin de librar una concomitante guerra de propaganda en la que se exhiba a China como agresiva y expansionista, al unísono de un sistema de control civil en el propio suelo estadunidense para instalar un Estado policiaco que elimine la oposición contra la guerra. ¡Algo aprendieron de la oposición a la guerra de Vietnam, que se perdió antes en EU que en Hanói!

 

En su conclusión, Rand diluye su vino nuclear: una guerra premeditada (sic) entre EU y China es muy improbable (¡supersic!), pero el peligro de que una crisis mal manejada pudiera desencadenar las hostilidades no puede ser desechado cuando ninguno desea la guerra (sic), pero los militares de ambos países tienen planes para librar una.

 

Como los chinos no están desarmados ni son mancos, el rotativo El Diario del Pueblo, órgano oficial de su Ejército de Liberación, arremetió contra EU por ser una fuente del caos en el mundo, en similitud al megaespeculador George Soros, indiciado como agente de la CIA, quien ha sido expuesto como el sembrador del caos global, según filtraciones que fueron hackeadas, y que también afectaron mi portal y mis redes sociales por haberlas divulgado (https://goo.gl/zecQWw).

 

El rotativo condensó tres artículos de académicos chinos, quienes analizan la causa de los movimientos expansivos y hegemónicos de parte de EU desde las perspectivas sistémica, ideológica y estratégica cuando Washington lleva consigo el caos por doquier: desde Medio Oriente, pasando por Europa oriental, hasta el Mar del Sur de China.

 

El complejo-militar-industrial de EU, que padece una angustia hegemónica, ha secuestrado la política doméstica y diplomática de EU, a juicio del rotativo chino, cuando EU se ha vuelto “un perturbador del orden y la paz para mantener su status quo” con el fin de “mantener la supremacía del dólar (¡supersic!) y su hegemonía en los campos militar, político y cultural (https://goo.gl/VbY3XE)”.

 

El grave error del CSIS y Rand es que no toman en cuenta el nuevo orden tripolar geoestratégico entre EU, Rusia y China, que epitomiza en un “triángulo geoestratégico (https://goo.gl/hXOTk8)”, otro think tank, Carnegie Endowment: “existe un equilibrio estratégico, especialmente nuclear, entre las tres súper potencias, con una relación asimétrica entre China y EU, una simétrica entre Rusia y EU, y una latente entre China y Rusia.

 

El nuevo orden global será tripolar o no será.

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Publicado en La Jornada (Miércoles 21 de septiembre de 2016)

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