Al salir de la Curia Episcopal, el papa Francisco se dirigió a la Catedral de San Cristóbal de las Casas, donde depositó un arreglo floral y rezó de pie ante el sepulcro del obispo Samuel Ruiz García, defensor de los derechos de los indígenas.
Posteriormente, el pontífice se acercó a las personas que estaban al interior del templo, quienes lo recibieron entre porras, aplausos y cánticos religiosos.
El papa se dirige al Estadio Víctor Manuel Reyna para sostener un encuentro con las familias.