Ya sea por descuido, por la prisa o porque simplemente no quisiste bajar la velocidad, es muy probable que en alguna ocasión te hayas “brincado” los topes de la peor manera y, aunque a primera vista no se noten los daños, esto puede presentar un terrible daño a tu vehículo.
Aquí te presentamos ciertas razones para que conduzcas con cautela cada que tengas que pasar un tope:
Las llantas se dañan: Pueden abollarse y facilitar la aparición de “chichones” que arriesgan su funcionamiento y por lo tanto, la seguridad de los ocupantes. Si notas la aparición de alguna abolladura cambia la rueda.
El chasis se merma: Tu auto comenzará a presentar holguras en sus componentes que, con el tiempo, desembocarán en visitas recurrentes al mecánico.
Disminución de la vida útil de los amortiguadores: Este sistema absorbe los impactos de los baches y topes, así que si transitas a velocidades inadecuadas comenzará a mermarse y pronto desde tu asiento sentirás los efectos.
Puede ocurrir un accidente: La mayoría de los topes se ubican previo al cruce de una calle o en un área donde caminan muchas personas: por favor ten cuidado, pues brincarlos a altas velocidades podría provocar un accidente.
Procura pasar los topes a una velocidad máxima de 10 km/h y así prolongarás la vida de tu compañero de viajes. Fotos: Circula Seguro
Fuente: Autopistas