Un hombre fue víctima de una explosión accidental que él mismo causó cuando, adentro de su carro, roció un desodorante en aerosol para luego encender un cigarrillo.
Al tener las ventanas del vehículo cerradas, este joven ocasionó una reacción química que estrelló el parabrisas de su automóvil y los vidrios de los locales cercanos.
Por fortuna, él no sufrió más que heridas superficiales y pudo salir tambaleándose de su carro para ser trasladado a una clínica cercana.
Los sucesos se dieron el pasado mes de diciembre en el distrito de Yorkshire y el incidente ocurrió debido a la combinación de productos inflamables.
Según los especialistas, si el auto se hubiera encontrado en movimiento el desenlace habría sido catastrófico para este muchacho.
La reacción entre las partículas del desodorante en aerosol y el fuego con el que este joven intentó encender su cigarrillo fueron las detonantes de la explosión.
Por este motivo, las autoridades han recomendado a las personas tener sumo cuidado con los productos que utilizan y la forma en que los emplean, siempre leyendo bien las instrucciones de uso.
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