Tener un romance con un compañero de trabajo puede resultar excitante, más cuando se tiene tan poco tiempo para buscar pareja en lugares diferentes a la oficina; además, puede ser estimulante intercambiar miradas seductoras y aparentar seriedad y profesionalismo en reuniones de trabajo, cuando ambos están pensando en el increíble sexo que tendrán al salir de ahí.
¿Correcto o incorrecto?, este es el debate de los psicólogos organizacionales, quienes no lo recomiendan, ya que pueden involucrarse sentimientos.
Aunque no se va a negar que puede traer consecuencias en el desempeño, a unos puede hacerlos trabajar más porque les motiva la idea de salir de trabajar y desquitarse, mientras a otros le puede resultar desconcertante tener a esa persona que es objeto de deseo cerca y tener que trabajar.
Por eso es importante que seas muy precavido e inteligente si quieres participar en este juego. No querrás arriesgar tu trabajo por una aventura sin futuro; así que aquí te damos algunas instrucciones para disfrutar sin renunciar.
ESCOGE A TU PAREJA SABIAMENTE
Si está por encima de ti, no puede estar encima tuyo, y si está debajo de ti, no podrás estar encima. Lo más recomendable es que se encuentren en la misma posición laboral; de lo contrario, hay un mayor riesgo de que algún colega envidioso empiece a sospechar.
NO CONFÍES EN NADIE
Con discreción seguro disfrutarás más los encuentros casuales.
NIÉGALO TODO
Si fuiste lo suficientemente inteligente como para no usar el correo electrónico interno para escribir correos obscenos y no hay evidencia alguna ante las cámaras de seguridad, nadie puede estar seguro que ustedes están teniendo un romance.