El crimen organizado no hace cuarentena y Guanajuato sigue a merced de la violencia extrema y ejecuciones.
Ejemplo de ello son los hechos en Celaya, donde un policía de tránsito y otro vial, fueron acribillados por un comando armado que los sorprendió afuera de una funeraria donde velaban a otro compañero, ejecutado apenas este lunes 13 de abril.
Uno de los efectivos quedó en el interior de la unidad policial y el otro, luego del ataque, fue trasladado a un nosocomio para recibir atención médica; no obstante, falleció minutos después.
SECUESTRAN Y MATAN A POLICÍA
Ambos elementos del orden acudieron al velorio de un policía de tránsito que este lunes fue plagiado (levantado) cuando prestaba servicio, quedando su patrulla abandonada.
Horas más tarde, el efectivo apareció muerto y envuelto en bolsas de plástico negras.
Así opera el crimen organizado en Celaya, Guanajuato, tierra donde la violencia mantiene en jaque no sólo a la población, también a los cuerpos policiales.