Semáforo Delictivo informó que las ejecuciones del crimen organizado en el país se han incrementado un 53 por ciento, respecto del año pasado.
En conferencia de prensa, Santiago Roel, fundador del Semáforo dijo que hasta septiembre pasado ya se reportaron más de 13 mil 513 ejecuciones a manos del narco, lo que representó un incremento del 53 por ciento, con respecto al mismo periodo del año pasado.
SE ELEVAN HOMICIDIOS DOLOSOS
También señaló que entre enero y septiembre se reportan 18 mil 505 homicidios dolosos en el país, con 22 mil víctimas, lo que representa un 23 por ciento más en comparación con el mismo periodo de 2016.
Para este año cerrará con más de 24 mil homicidios y 18 mil ejecuciones, convirtiendo al 2017 en el peor año de la historia reciente en materia de seguridad.
Informó que para el tercer trimestre del 2017 se incrementaron los homicidio en 27 de los 32 estados, mientras que todos los delitos de alto impacto también subieron.
FALLIDA, ESTRATEGIA DE SEGURIDAD
Roel aseguró que en 27 de los 32 estados de la República aumentaron los asesinatos intencionales. Los estados que reportaron un mayor aumento en este delito fueron: Nayarit, con 346 por ciento; Baja California Sur, con 153; Aguascalientes, con 121; Quintana Roo, con 101 y Baja California, con 72 por ciento.
Indicó que la extorsión y el robo de auto se incrementaron 16 puntos porcentuales y en lo que va de este año, las lesiones dolosas 14; el secuestro, 9; y el robo a casa habitación 3 por ciento.
El titular de Semáforo Delictivo precisó que las cifras demuestran que la estrategia de seguridad está fallando; remarcando que el Pan Mérida no funciona.
CRIMEN ORGANIZADO, DETRÁS
Dijo que es la principal causa de violencia de alto impacto es a causa de la guerra contra el narcotráfico y que la propuesta es el cese a las prácticas de violencia y mejor una regulación en materia de drogas como una estrategia para buscar la paz.
También aseguró que esto permitiría no sólo regular y controlar el mercado de las drogas, sino quitarle el poder económico a las mafias del narco y reducir el consumo, la violencia y la corrupción.
El estudio destacó que el 53 por ciento de la población no llama a la policía en caso de una emergencia y un 73 por ciento del total de homicidios son ejecutados por el crimen organizado.