El gobierno del presidente Donald Trump impuso nuevas restricciones comerciales y de viajes a Cuba que dificultarán la visita de estadounidenses a la isla.
Las nuevas normas son la aplicación de la política de Trump de revertir parcialmente la apertura diplomática hacia La Habana iniciada por su predecesor Barack Obama.
Los norteamericanos que quieran ir a Cuba deberán hacerlo en tours organizados por empresas de EU y acompañados por un representante del grupo patrocinador.
El Departamento del Tesoro eximió de esta norma los viajes reservados antes de que Trump anunciara su política hacia Cuba el 16 de junio.
En tanto, el Departamento de Estado publicará una lista de decenas de hoteles, tiendas y otros negocios que, dice, tienen vínculos con las fuerzas armadas cubanas. Los estadounidenses no pueden hacer negocios con ellos, lo cual dificulta aún más los viajes.