Cortesía de su homologo turkmeno, Kurbanguly Berdymukhamedov, Putin se dio a la tarea de recibir como regalo un perro cachorro de raza alabay, también conocido como perro pastor de Asia Central.
“Tenemos un amigo en común -este es el este es el perro alabay, único del mundo- y hoy traje a este pequeño alabay conmigo”, expuso el primer mandatario de Turkmenistán antes de congregarse con su homólogo ruso, cuyo amor por los perros es mundialmente conocido, en el balneario de Sochi.
Putin, que el pasado fin de semana cumplió 65 años, se dio a la tarea de abrazar de inmediato al cachorro, llamado Verny -que significa ‘leal’, en ruso-, y lo besó en la frente.
El alabay constituye una variante turkmena de los perros pastores de Asia Central.
Junto a las alfombras elaboradas a mano y la legendaria raza de caballos Akhal Teke, los alabay son considerados como patrimonio nacional de Turkmenistán, país localizado en el corazón de Asia.
Los alabay son famosos en su país por su valentía, ya que suelen ser utilizados para proteger al ganado de los lobos, además de que tienen fama de feroces perros guardián.
En el pasado, el jefe del Kremlin también ha recibido perros de razas únicas como regalo, por parte de otros líderes mundiales.