Édgar Zambrano, presidente de la Comisión de Defensa de Asamblea Nacional (AN, Parlamento), comunicó hoy que esta citación fue pautada para el próximo miércoles “a efectos de investigar los hechos ocurridos en el interior de una vivienda ubicada en El Junquito”, a las afueras de Caracas, donde tuvo lugar el operativo.
La Comisión también se dio a la tarea de citar por estos hechos al comandante general de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada), Richard López Vargas, para que junto al ministro narré “la versión oficial de los hechos” y así poder “precisar las responsabilidades a las que haya lugar”.
En un comunicado, la Cámara enfatiza que Pérez y otras 6 personas que supuestamente eran parte de su grupo insurrecto fueron abatidas “a pesar de que hubo, tal como se evidencia en un video (difundido en redes sociales), una manifestación expresa de rendición y negociación”.
“Podríamos estar en presencia de delitos o crímenes de lesa humanidad que generan responsabilidad penal nacional e internacional”, dijo Zambrado, citado en la nota oficial, en la que se denuncia la “crueldad con la cual se llevaron a cabo” las acciones de las fuerzas del orden contra los sublevados.
El parlamentario aseguró que el Estado venezolano violó “al menos 10 tratados, instrumentos, pactos y protocolos internacionales” en materia de derechos humanos, y denunció el uso desproporcionado de la fuerza pública que “actuó de manera ventajosa al utilizar unos 600 efectivos de tropa” contra una decena de rebeldes.
“De manera inexplicable no se permitió la actuación del Ministerio Público, organismo que de acuerdo a la Constitución y demás leyes tiene la obligación de mediar oportunamente para lograr la solución pacífica de un determinado conflicto”, agregó el diputado.
El Parlamento venezolano fue despojado de sus funciones legislativas y de control luego de la victoria opositora en las legislativas de diciembre de 2015. Los ministros chavistas no acudieron a pasadas citaciones del Parlamento para explicar su gestión.
Pérez se rebeló contra Maduro el pasado junio cuando sobrevoló Caracas con un helicóptero de la Policía científica y disparó contra dos edificios oficiales sin causar heridos o muertos.
Desde entonces pudo grabar desde la clandestinidad varios videos en los que pedía un alzamiento popular contra el Gobierno chavista, y el mes pasado asaltó junto a sus hombres una base militar de la que sustrajo armamento y sometió a los soldados, a los que les recriminó su lealtad hacia Maduro.
Antes de ser abatido el exagente de 36 años difundió en las redes varios videos en los que pedía entregarse para salvar las vidas de los “civiles inocentes” que decía que había en la vivienda donde se atrincheró en el oeste de Caracas.
El chavista Diosdado Cabello aseguró el miércoles que en la operación hubo enfrentamientos a disparos durante al menos siete horas y acusó a los insurrectos de tener en el sitio un carro lleno de explosivos con el que pretendían, dijo, asesinar a más funcionarios.