El Servicio de Administración Tributaria (SAT) se dio a la tarea de identificar 6 mil 492 compañías que presuntamente efectúan transacciones inexistentes, las cuales se encuentran vinculadas con 224 mil 773 operaciones de facturación.
Al cierre de 2017, las empresas fantasma han facturado más de 1.4 billones de pesos, número equivalente a 5 por ciento del producto interno bruto (PIB) de México, detalló el jefe del SAT, Osvaldo Santín, en la inauguración del 11 seminario de Actualización fiscal y legislativa, organizado por el Colegio Nacional del Notariado Mexicano (CNNM).
En 3 mil 918 casos se consiguió comprobar que se trata de empresas fantasmas y que han simulado 151 mil 431 operaciones por 783 mil millones de pesos.
El funcionario agregó que se recuperaron 9 mil 130 millones de pesos, de los que 5 mil 910 millones corresponden al impuesto sobre la renta, 2 mil 947 al impuesto al valor agregado y 273 millones al impuesto empresarial a tasa única, añadió Santín.
“Siendo ambos (SAT y notarios) responsables de darle vida a las personas jurídicas y morales, al de no ser efectivos en esa función abrimos las puertas al crimen organizado, para el lavado de dinero, la evasión fiscal, el contrabando y la corrupción. Todos esos fenómenos suceden gracias a que hay personas morales, hay empresas, que desaparecen, que no tienen una materialidad”, explicó.
Ante la situación descrita, señaló el jefe del SAT, es necesario un monitoreo permanente de las operaciones del contribuyente, fiscalizar la emisión indiscriminada de facturas electrónicas (CFDI) que amparen operaciones irregulares, mantener alertas y bloquear el certificado de sello digital (CSD) en operaciones que rebasen umbrales, así como crear empresas confiables.
En tanto, José Antonio Manzanero Escutia, presidente del CNNM, indicó en entrevista que las empresas fantasmas son “un tema que ha tenido cierta relevancia en entidades como Veracruz, por ejemplo, donde se habla mucho de eso”, y resaltó que los notarios sí enfrentan amenazas del crimen organizado.
“No es igual la realidad que viven los notarios de Ciudad de México a la que enfrentan los de Michoacán, Guerrero o Tamaulipas. Desgraciadamente eso existe, pues integrantes del crimen organizado amenazan y va en contra no solo del notario, sino de su familia. Es una realidad que a veces mucha gente no ve”, expuso.
Manzanero agregó que entre las cinco actividades más vulnerables donde interviene el crimen organizado destaca la transmisión y cotización de derechos reales sobre inmuebles, al brindar financiamientos o préstamos, o simulando operaciones por medio de poderes, acciones que el notario tiene la obligación de reportar a la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda.
Un segundo segmento, agregó, es la creación de empresas morales, pero solo cuando el capital inicial es superior a 600 mil pesos.
Así, aseguró el presidente del CNNM, los notarios cumplen con identificar a los contribuyentes y dar los avisos de operaciones de naturaleza sospechosa, “cumplimos cabalmente con esta función”, pero es deseable que haya una reforma legislativa que dé un marco más adecuado para el cumplimiento de actividades vulnerables.
“En la medida en que cerremos la pinza y tengamos herramientas más útiles, más eficientes de información, de fácil cumplimiento, se logrará un mejor efecto”, concluyó Manzanero.