Investigaciones de especialistas de la Universidad de Yucatán y autoridades ambientales concluyeron que la gran mayoría de los varamientos y muerte de mamíferos marinos en costas de Yucatán y Quintana Roo, son por causas humanas.
“Está la interacción humana, es decir, ya sea por encallamiento, heridas, por captura deliberada, o por enmallamiento con redes o interacción con pesquerías, puede ser también por contaminación”, expuso Raúl Díaz, representante de Mamíferos Marinos de la Universidad de Yucatán.
Del 2000 al 2017, perdieron la vida 153 ejemplares, el 2016 fue el año histórico de varamientos marinos en Yucatán con 25 casos y en lo que va de este año son tres ejemplares encontrados muertos.
En el caso de Quintana Roo, en los últimos cuatro años se suscitaron 18 casos, muchos de ellos atrapados en redes de pesca.
“Interacción humana de manera directa, es decir, asfixia que se generan derivado de cordeles o redes de pesca”, dijo José Lafontaine, delegado en Yucatán de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Para las autoridades ambientales otra causa de muerte es por la presencia de barcos o embarcaciones pesqueras que utilizan radares.
“Se ha documentado que tiene efectos en la orientación o dependiendo de la cercanía hasta ruptura de tímpanos o de líneas laterales y afecta y desorientan”, precisó el secretario de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Eduardo Batllor.
En el Golfo de México viven 29 especies de mamíferos marinos y son los delfines nariz de botella, delfín tonina y cachalotes pigmeos, las especies que más se hallan muertas en las costas yucatecas.