Colombia hace frente a una emergencia ambiental por una fuga de petróleo que en 24 días no ha sido completamente controlada por la estatal Ecopetrol.
El derrame de crudo ocurrió en un pozo inactivo en departamento de Santander, al norte del país. La mancha de petróleo, lodo y agua ya alcanza los 23 kilómetros de longitud.
Casi 70 habitantes de la zona tuvieron que ser reubicados de forma preventiva, mientras que 1235 mamíferos, aves y reptiles han sido rescatados de la contaminación.
Si bien aún no se establecen las causas de la fuga, Ecopetrol consideró que la emergencia pudo desatarse por “problemas de presión” en el pozo o por actividad sísmica.
