A finales de marzo pasado, una grieta se dio a la tarea de abrirse en la tierra cerca del suroeste de Kenia, en África.
La grieta, de varios kilómetros de longitud, cruzó campos, carreteras, poblados e incluso una reserva importante de la zona, lo que alarmó a los lugareños y puso en alerta a los especialistas.
Se estima que esta raja posee 20 metros de ancho y 15 de profundidad, y que las naciones que atraviesa son Kenia, Tanzania y Etiopía.
Los más fatalistas señalan que la grieta recuerda que el continente africano se encuentra envuelto en un agresivo proceso de separación a nivel tectónico, y es cierto, pero no toman en cuenta que esta partición tomará millones de años.
La Tierra se encuentra en constante movimiento. Sus placas tectónicas no paran de rozar entre ellas o acumular energía que posteriormente se libera en forma de sismos.
En el caso de África, hay dos placas que actualmente están acumulando tensión y provocando rajas en el suelo, la Arábiga y la Nubia.
La inestabilidad de la Tierra es tal que todos los días hay terremotos de diferentes magnitudes, se abren valles y levantan montañas, todos procesos completamente naturales y con los que la humanidad ha aprendido a vivir.
Especialistas del departamento de geodinámica de la Universidad de Granada, dijeron al diario El País, la situación que vive África y que amenaza con separar el continente en dos.
“Sabemos qué pasará, pero no cuando,” indica Juan Ignacio Soto, catedrático de dicha institución académica, “Por debajo hay una falla en el terreno que está separando África en dos,” añade.
La grieta que apareció hace unos días en Kenia no es más que el recordatorio de que el planeta nunca está quieto, sino que se encuentra sumergido en un imparable proceso de cambio constante. Ejemplo de esta inquietud es el Gran Valle del Rift, una gran grieta que va desde Mozambique hasta el cuerno de África.
Sin embargo, lo que ha llamado la atención de los especialistas es que la grieta nueva de Kenia es muy larga, lo que la hace especial y distingue del resto.
Catedráticos como Soto dicen que tal vez las lluvias hayan ensanchado la magnitud de la brecha, pero aún quedan pruebas geológicas por realizar para confirmarlo.
Sí, en millones de años África se dividirá en dos, pero mientras eso sucede, la región más “afectada” por estas grietas que surgen en el suelo, será bendecida por una de las proporciones de biodiversidad más ricas en la región, según indica el reporte de los expertos citados por el diario español.