La diseñadora estadounidense Kate Spade, fallecida en un aparente suicidio ayer en su casa en Nueva York, había sufrido un trastorno bipolar durante los últimos años, según señaló su hermana Reta Saffo a medios locales.
“No recibió el cuidado adecuado para lo que creo era (e intenté numerosas veces ayudarla a tratarse) un trastorno bipolar”, expresó Saffo, dos años mayor que Kate, al canal NBC 4, donde consideró que la diseñadora no esperaba la “inmensa celebridad” que cosechó ni estaba “preparada” para ella.
Fuentes policiales dijeron a Page Six que el motivo del suicidio podría ser “problemas familiares” en su “relación” de pareja, y otros medios especializados en farándula apuntan a que el marido de la diseñadora, Andy Spade, estaba buscando un apartamento.
Según versiones, su marido Andy estaba en la casa familiar en el momento de su muerte mientras que su hija, Frances Beatrix, de 13 años, estaba en la escuela.
Graduada en periodismo, Spade comenzó su carrera en los años 80 en la revista “Mademoiselle” en Manhattan, donde fue editora de moda y accesorios, y más adelante, en 1993, cofundó junto a su marido la marca Kate Spade New York.