Pese al riguroso proceso de selección de la Academia Militar de West Point, uno de cada cinco estudiantes abandona este colegio antes de la graduación. Una cantidad considerable se da a la tarea de abandonar el verano antes de primer año, cuando los cadetes pasan por un riguroso programa llamado “Bestia”. Bestia consta de retos físicos, mentales y sociales extremos que están diseñados para poner a prueba la perseverancia de los candidatos.
Para aumentar su fuerza mental, solo debe cambiar su perspectiva. Cuando se avecinan tiempos difíciles, las personas con fuerza mental sufren tanto como todos los demás. La diferencia es que ellas entienden que los momentos difíciles de la vida ofrecen lecciones valiosas. Al fin y al cabo, son estas duras lecciones las que generan la fuerza que se necesita para tener éxito.
Las personas mentalmente fuertes siguen estos hábitos:
- Tiene que luchar cuando ya se sienta derrotado
Un comunicador le preguntó una vez a Muhammad Ali cuántos abdominales hacía a diario. Él respondió: “No cuento todos los abdominales que hago; yo solo cuento cuando empiezan a dolerme, porque esos son los que realmente cuentan”. Lo mismo se aplica para el éxito en el lugar de trabajo. Uno siempre tiene dos opciones cuando las cosas empiezan a ponerse difíciles: se puede superar un obstáculo y crecer en el proceso o dejarse vencer. Los seres humanos son animales de costumbre. Si se rinde cuando las cosas se ponen difíciles, es mucho más fácil rendirse la próxima vez. Por otro lado, si se esfuerza para superar un desafío, la fuerza comienza a crecer dentro de uno.
- Debe retrasar la gratificación
El hecho es que el retraso de la gratificación y la paciencia son esenciales para el éxito. Las personas con fuerza mental saben que los resultados solo se materializan cuando se invierte tiempo y se renuncia a la gratificación instantánea.
- Cometer errores, parecer un idiota y volver a intentarlo, sin siquiera pestañear
En una invstigación reciente del College of William and Mary, los investigadores entrevistaron a más de 800 empresarios y descubrieron que los más exitosos suelen tener dos cosas importantes en común: son incapaces de imaginar el fracaso y tienden a no preocuparse por lo que otras personas piensen de ellos. En otras palabras, los empresarios más exitosos no dedican tiempo ni energía en preocuparse por sus fracasos, ya que los ven como un pequeño paso necesario en el proceso de alcanzar sus objetivos.
- Es necesario mantener las emociones bajo control
Las emociones negativas ponen a prueba la fuerza mental en cada paso del proceso. Si bien es imposible no sentir emociones, es totalmente posible manejarlas de manera eficaz y mantenerlas bajo control. Cuando se deja que las emociones superen la capacidad de pensar con claridad, es fácil perder la determinación. El mal humor puede hacer que reaccione agresivamente o se aparte de la dirección elegida con la misma facilidad que un buen estado de ánimo puede llevarlo a un exceso de confianza y a ser impulsivo.
- Debe tomar las decisiones que tiene miedo de tomar
A veces es necesario hacer cosas que no queremos hacer porque sabemos que es lo mejor a largo plazo: despedir a alguien, hacer llamadas en frío a un extraño, dejar a una persona toda la noche para lograr que el servidor de la empresa vuelva a funcionar o desechar un proyecto y empezar de nuevo. Es fácil dejar que el reto inminente nos paralice, pero las personas más exitosas saben que en estos momentos, lo mejor que pueden hacer es comenzar de inmediato. Cada momento que pase temiendo a la tarea le restará tiempo y energía a realmente llevarla a la práctica. Las personas que aprenden a tomar habitualmente las decisiones difíciles se destacan como flamencos en una bandada de gaviotas.