La red de mensajería por internet Whatsapp prometió al Gobierno indio actuar “rápidamente” contra la difusión de noticias falsas que, en los últimos meses, han causado una serie de linchamientos en India.
“Como el Gobierno indio, estamos horrorizados por estos terribles actos de violencia y queremos responder rápidamente a los problemas tan importantes”, dijo la compañía en una carta enviada al Ejecutivo y difundida por medios indios.
La empresa estadounidense respondía con esta misiva a la llamada de atención lanzada por el Ministerio de Electrónica indio, que le pidió las “medidas correctivas necesarias para evitar la proliferación de estos mensajes falsos”.
MECANISMOS DE CONTROL
El ministro de Electrónica indio, Ravi Shankar Prasad, agradeció en una rueda de prensa en Delhi la “rápida respuesta” de Whatsapp y añadió que espera que la compañía ponga “pronto” en marcha algunos de los mecanismos de control anunciados.
Whatsapp, propiedad de la red social Facebook, prometió que para atajar los “rumores” tiene en pruebas una nueva herramienta que permite resaltar un mensaje cuando éste ha sido directamente reenviado y no escrito por el usuario.
La compañía de mensajería, que dice preocuparse “profundamente” por la seguridad de sus clientes, también reveló un nuevo proyecto con investigadores indios para “aprender más sobre la propagación de desinformación”.
FAKE NEWS
Las noticias falsas y la desinformación “son asuntos que se afrontan mejor de manera colectiva: con el Gobierno, la sociedad civil y las compañías tecnológicas trabajando juntas”, subrayó Whatsapp.
El pasado domingo, una muchedumbre linchó a cinco hombres en el estado de Maharasthra, en el oeste de la India, porque había un rumor de que un grupo de secuestradores había acudido a un pueblo a raptar niños.
Luego resultaron ser personas sin recursos de una localidad vecina que habían ido a pedir limosna. Este caso se une a varios otros ocurridos durante los últimos meses en diversos puntos del país asiático, como la semana pasada en Tripura (noreste), donde tres personas fueron linchadas en incidentes separados, entre ellas un trabajador contratado por el Gobierno precisamente para concienciar contra los rumores.