Según la Encuesta Nacional de Victimización (ENVIPE, 2016) la seguridad está preocupando al 60% de la población mexicana. El alza de homicidios, la cercanía con personas víctimas de delitos, y el constante sentimiento de inseguridad es una preocupación que sólo hace desear no ser los siguientes.
En promedio, 21.2 millones de mexicanos, en los últimos seis años, son víctimas de enfrentamientos entre bandas del crimen organizado o ataques en carretera.
La gestión de las autoridades
El artículo 2° de la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública dice que la seguridad pública es una responsabilidad de los tres órdenes de gobierno. Las autoridades gubernamentales han centrado esta responsabilidad en un esfuerzo para mantener las cosas en paz y para conseguir que en el territorio que gobiernan se viva bien y con tranquilidad.
El 50% de la gente sigue desconfiando de la policía, el ministerio público y los jueces, al tiempo que el porcentaje de delitos no denunciados permanece por arriba del 90%. Actualmente, el Congreso discute tanto la iniciativa de Mando Mixto de la policía como la de seguridad interior para regular la presencia de las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública.
El año 2016 cerró con más de 20 mil homicidios y los números del primer cuatrimestre de 2017 indican que es muy probable que sea el año más violento en la década, y que lleguemos al cuarto de millón de homicidios.
La seguridad pública es un concepto que comienza a mostrar sus límites como guía de las políticas púbicas dirigidas a proveer seguridad.
La seguridad ciudadana, por medio de la participación activa de diversos actores sociales en problemas específicos de seguridad, tiene el potencial para guiar políticas públicas para generar entornos más seguros.
¿Qué estas haciendo tu en tu comunidad, con tus vecinos para acabar con la inseguridad?
