En la integración del nuevo Senado, PRD y PRI fueron los más afectados por la migración de sus integrantes a otro instituto político, ya que el perredismo tuvo 19 bajas, de las cuales 18 se fueron a Morena, mientras que 16 priistas entraron al Senado por otro partido, ocho de ellos por Morena, que es el partido que concentra 71% de los tránsfugas, pues de 39 de los 55 políticos que cambiaron colores se fueron a Morena.
La revisión del pasado partidista de los nuevos senadores de la República, que comenzarán su función a partir del 1 de septiembre, permite observar que hay 55 que llegaron al Senado por un partido político diferente al cual militaron o con el cual ganaron su última elección.
De ellos, 19 fueron del PRD, que es el partido que más bajas tuvo; 16 militaron en el PRI; seis eran del Partido Verde, cinco del Partido del Trabajo, cuatro del PAN, cuatro de Movimiento Ciudadano y uno solo que reportó ser militante de Morena, pero llega al Senado como legislador del PT.