El gobierno de Nicaragua expulsó a la misión del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU dos días después de que emitió un contundente informe sobre abusos contra manifestantes antigubernamentales, denunció un organismo local de derechos humanos.
El gobierno del presidente Daniel Ortega ordenó a la misión encabezada por Guillermo Fernández Maldonado salir del país, denunció en rueda de prensa el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH).
“Esta insólita decisión es inoportuna (…) refleja el ánimo de una persona que se siente completamente perdida que ya no puede ocultar sus responsabilidades y seguir ocultando la verdad”, manifestó la presidenta del Cenidh, Vilma Núñez, en una referencia a Ortega.
“CLIMA DE MIEDO”
El informe de la ONU, divulgado el miércoles en Ginebra, destacó el “clima de miedo” en Nicaragua tras la violenta represión a las protestas iniciadas en abril pasado contra el gobierno de Ortega.
“La represión y las represalias contra los manifestantes prosiguen en Nicaragua, mientras el mundo aparta la vista”, señaló el Alto Comisionado, Zeid Ra’ad Al Hussein, en un comunicado en ocasión de la publicación del informe.
Ortega refutó duramente el documento y acusó al organismo de la ONU de ser “un instrumento de políticas de terror, mentira e infamia”.