El viernes pasado, 7 de septiembre, se viralizó un clip con Elon Musk fumando mota y bebiendo whiskey en el podcast del comedianta Joe Rogan. Aparentemente, Musk intentaba demostrar que no es un completo nerd, ni sólo uno más de esos millonarios aburridos y quería enseñar “su lado salvaje”.
La locura de Musk le ayudó a volverse viral y aparecer en la mayoría de los medios, sean tecnológicos o no.
Lamentablemente, a las pocas horas después de que se publicó el video de Musk mariguano, también se dio a conocer que ese había sido el peor día en los últimos dos años para las acciones de Tesla. Así, en el transcurso de ese día, las acciones de Tesla bajaron hasta un 10 por ciento, alcanzando un precio de 261 dólares por acción. Al final, se recuperaron levemente y la caída terminó en 6.7 % menos del valor inicial.
Es importante recordar que el precio de las acciones de Tesla había subido hace unas semanas, luego de que Musk amagó con recomprar la compañía para volverla a hacer una empresa privada.
La mayoría de los medios informativos culparon al bache de Tesla a las erráticas acciones de Elon Musk. Pero, eso no es del todo cierto.
Si bien, siempre será mejor tener a un CEO y Presidente que se comporte de manera institucional, la caída de las acciones de debía a otro hecho. En menos de 48 horas renunciaron dos importantes directivos: el director de Contabilidad, Dave Morton, y la jefa de recursos humanos de Tesla, Gaby Toledano.
Así, en realidad los problemas estructurales internos, han sido los culpables de la caída de las acciones de Tesla, y no la fumada de marihuana de Musk. Fuente: Códico Espagueti