Lanza severa advertencia el comandante del Ejército de Brasil

 

MSIA Informa

Frente a la crispación de la contienda electoral que elegirá Presidente, gobernadores, y Congreso, el próximo 7 de octubre, (primera vuelta), el comandante del Ejército, general Eduardo Villas-Bôas concedió una entrevista que repercutió en todo el país.  Publicada en el periódico O Estado de S. Paulo de 9 de septiembre, cada grupo político jaló para su lado lo que más le convino.

 

El trecho que provocó la controversia fue el comentario del general sobre la posibilidad de que el resultado de las elecciones sea cuestionado.

 

El general Villas-Bôas fue muy explicito afirmando que poner en duda la voz de las urnas podría venir de cualquier color ideológico. En referencia al atentado a puñaladas sufrido por el candidato del PSL, Jair Bolsonaro, el pasado 6 de septiembre, afirmo: “El atentado confirma que estamos creando dificultades para que el nuevo gobierno tenga estabilidad, para la gobernabilidad, se puede llegar al extremo de dudar de su legitimidad. Y si él es electo, probablemente se podrá decir que salió beneficiado por el atentado, porque provocó conmoción. Entonces se altera el ritmo normal de las cosas y eso es preocupante”.

 

Así mismo enfatizo, “la intolerancia es muy grande. Y ese atentado, infelizmente confirma esa intolerancia generalizada y nuestra falta de capacidad de poner por arriba de esas cuestiones políticas y personales los intereses del país”. Agregó, “preocupa que la exacerbación de las divisiones termine minando tanto la gobernabilidad como la legitimidad del próximo gobierno”.

 

Tal como están de inflamados los ánimos en el país, los simpatizantes y partidos más alineados con lo que comúnmente se define de izquierda catalizarían la derrota como un veto militar al eventual triunfo de sus candidatos, en particular al candidato presidencial del Partido dos Trabalhadores (PT), Luiz Fernando Haddad, que realiza su campaña a nombre del ex Presidente Lula da Silva, quien cumple pena acusado de delitos de corrupción.

 

No obstante, el comandante el Ejército negó que un eventual gobierno de Bolsonaro sería un gobierno militar, admitiendo que es obvio que el ex capitán “tiene simpatía en el público militar, porque él procura identificarse con los asuntos valorados por las Fuerzas Armadas, además de tener un sentido agudo de oportunidad”. Más aun, “la postura y la conducta de las Fuerzas Armadas de las Fuerzas Armadas serán exactamente las mismas en un gobierno de izquierda o de derecha, sin ‘fulanizar’ [personificar]”.

 

Días después, el propio Bolsonaro menciono la hipótesis de un fraude electoral contra él, mediante la posible interferencia en el sistema electrónico de votación. Por otro lado la arbitraria conducta para mantener la candidatura del ex presidente Lula da Silva, hasta el último minuto, poco oculta la intención del PT de cuestionar la legitimidad de la elección. Por ello no se puede descartar que la dirigencia petista esté planeando desatar una radicalización desbordante. En gran medida, eso explica la alerta del general Villas-Bôas con el extremismo causado por el ambiente de intolerancia.

 

Para finalizar, el comandante condenó categóricamente el parecer de un Comité de Derechos Humanos (de poca importancia en su rango) de Naciones Unidas a favor del ex presidente Lula da Silva, catalogándolo de “una tentativa de invasión de la soberanía nacional”.

Noticias relacionadas

Comenta