David Brown, un joven estadounidense de 22 años, ha muerto después de haber mantenido relaciones sexuales con una anaconda.
Los paramédicos tardaron varias horas en conseguir separar al reptil de su miembro, puesto que la víctima contaba con una “erección completa” y había “penetrado profundamente” sus genitales.
El joven fue hallado cubierto por la anaconda, completamente desnudo, y a pesar de que un amigo llamó a las autoridades para salvar su vida, fue completamente imposible: “Yo sabía que le gustaba la bestialidad y la asfixia erótica, pero nunca pensé que iba a salir tan mal“, ha relatado su amigo.
El joven tenía todo tipo de mascotas en su casa, tal y como han recordado sus allegados. Entre ellas, se encontraban multitud de perros y gatos, tarántulas, serpientes, escorpiones, tortugas e incluso un cerdo salvaje bebé al que calificaba como “muy caliente”. Peppa Pig en toda regla.
PRACTICABA ZOOFILIA
Sus prácticas con animales (zoofilia) nunca fueron ningún secreto: “Siempre me dijo que no hacía daño a nadie y que los animales amaban tanto el sexo como los humanos, que era algo consensual. ¿Quién soy yo para juzgar?“, sostuvo su mejor amigo, Tyler Johnson.
Las personas más cercanas se mostraban preocupadas , pues Brown ya había tenido antes un accidente con un rodedor que le perforó accidentalmente el ano y le masticó el tracto intestinal.
En aquel caso sufrió una severa hemorragia interna y necesitó cirugía, pero a los dos meses le dieron el alta: “Pensé que había aprendido la lección de ese incidente anterior, pero definitivamente no“, dijo una exnovia de David.