Este lunes, el Gobierno de Ciudad de México ordenó la liberación de cinco indígenas presos “por delito de robo que tenían acceso a fianza y que por falta de condiciones económicas no habían tenido acceso a su liberación”.
Los detenidos, de origen náhuatl, otomí, zapoteco y mazateco, estaban presos por robo, sin embargo, ya fueron puestos en libertad.
VIOLARON SUS DERECHOS
La jefa de Gobierno capitalina, Claudia Sheinbaum, consideró que se violaron los derechos de las personas por ser de origen indígena y no tener los recursos para ser liberados. Además, precisó que su administración contará con traductores de distintas lenguas para la procuración de justicia.
Cifras de la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades (Sederec), revelan que actualmente hay 445 indígenas privados de su libertad en los centros de reclusión de ciudad, y de enero de 2016 a julio de 2018 solo 61 obtuvieron su libertad.