Un hombre fue condenado a prisión por haber abusado sexualmente de su propia hija entre los años setenta y ochentas en Brisbane, Australia.
Luego de pasar cinco años de procesos policiales y tras recibir su sentencia, al hombre también se le dictó pagar 660 mil dólares por daños.
VÍCTIMA CUMPLIÓ 51 AÑOS
Actualmente, la afectada es una mujer de 51 años quien esperó 30 años para denunciar a su padre debido a que éste la había amenazado de muerte si pedía ayuda.
En 2014 presentó una denuncia y durante el tiempo que duraron los litigios la mujer declaró las agresiones que sufrió.
Reveló que su padre abusó de ella por primera vez cuando tenía cinco años, al momento en el que su madre se encontraba en el hospital dando a luz a uno de sus cinco hermanos, y detalló que lo hizo en al menos 11 ocasiones hasta los 15 años.
La víctima solía dormir en el automóvil debido al temor que le producía el hombre.
LE “ENSEÑABA” SOBRE SEXO
Durante el juicio el abusador aseguró que mientras abusaba de su hija le estaba “enseñando” sobre sexo.
“Ella es mejor que tú”, le dijo a su esposa cuando lo sorprendió violando a la niña de cinco años.
Finalmente, la víctima señaló que las secuelas que aún sufre de los dolorosos y humillantes abusos son pesadillas, ansiedad, estrés postraumático y depresión.