En Argentina, una madre denunció la muerte de su bebé de tan solo ocho meses, en una zona rural ubicada en la localidad de Araujo, a 220 kilómetros del oeste de la Ciudad de Buenos Aires, pero horas más tarde se arrepintió y confesó que ella lo había ahogado en un balde con agua.
Voceros policiales informaron que efectivos del Comando de Patrullas Rural recibieron una llamada, donde se alertaba por la muerte de un bebé.
Al sitio acudieron servicios médicos y uniformados, quienes realizaron labores de resucitación al pequeño, pero lamentablemente solo confirmaron la muerte del infante.
SE AHOGÓ MIENTRAS LO AMAMANTABA
La madre del bebé relató que su hijo Santino se había ahogado mientras lo amamantaba, versión que también fue corroborada por el padre.
Ambos fueron trasladados hacia la dependencia policial del Comando de Patrullas para dar su declaración testimonial ante el ayudante fiscal y fue en ese momento que la madre se quebró y admitió el crimen.
La mujer fue detenida por el delito de homicidio doblemente agravado por el vínculo y por alevosía.