Laura Álvarez, una discreta activista social con una maestría en Derechos Humanos, podría convertirse en la primera mexicana en habitar el número 10 de Downing Street, la residencia oficial del primer ministro británico, si su marido el líder laborista, Jeremy Corbyn, se impone en las urnas.
Según la encuestadora YouGov, si las elecciones fueran mañana, el 42 por ciento votaría por el Partido Conservador y 38 por ciento por el Laborista, una brecha que se ha venido cerrando desde que Corbyn tomó el liderazgo del partido y se ha convertido en uno de los favoritos para ocupar el cargo.
ELLA, SU PRINCIPAL PROMOTORA
La pareja se casó en 2012 en la antigua Hacienda Panoaya, en el Estado de México, donde Sor Juan Inés de la Cruz -figura prominente de las letras hispanoamericanas de su tiempo- vivió de los tres a los ocho años de edad (1651 a 1656) y aprendió a leer y escribir.
Amigos cercanos a Álvarez señalan que ella apoya incondicionalmente a su esposo en los actos de campaña y va de puerta en puerta a promover el voto, en su distrito electoral.
Laura Álvarez, 22 años más joven que Corbyn, lo acompaña a las convenciones nacionales de su partido y a eventos públicos. Estudió en Londres una maestría en Derechos Humanos.
Originaria de la Ciudad de México, Álvarez se casó con Corbyn cuando él ya era una figura política, con 30 años como diputado del distrito de Islington, en el norte de Londres, una curul que ha retenido desde 1983 y desde donde ha abanderado distintas causas sociales y políticas.
Su destino cambió radicalmente cuando tras la derrota del laborismo en las elecciones generales de 2015 y la renuncia del entonces líder Ed Miliband, Corbyn se postuló para ser líder del Partido Laborista, uno de los más grandes de Europa con casi 600 mil miembros.
EMPIEZA A DESTACAR EN EL PARTIDO LABORISTA
En esa primera elección rumbo a la dirigencia “Labour”, Corbyn fue nominado con apenas 35 diputados de su partido, el mínimo requerido de los 229 que conformaban la cámara baja.
Pese a este incipiente apoyo de los parlamentarios logró ser electo con 59.5 por ciento de los votos de los miembros del laborismo.
Su liderazgo sufrió un revés cuando perdió el voto de confianza de sus diputados tras el referendo del 23 de junio de 2016 sobre la salida de la Unión Europea, (Brexit).
Su bancada partidista lo acusó de encabezar una campaña “débil” rumbo al plebiscito y de no haber convencido al electorado para votar “Remain” (Quedarse) en bastiones tradicionalmente laboristas.
Sin embargo, Corbyn salió fortalecido al ser reelecto en septiembre de 2016 con el 61.8 por ciento de los miembros de su partido.