Por unanimidad de votos de la Asamblea electiva de MORENA, Andrés Manuel López Obrador se convirtió en candidato electo del partido a la Presidencia de la República en un acto realizado en un hotel de la Ciudad de México, con presencia de figuras tales como la maestra Ifigenia Martínez, Porfirio Muñoz Ledo y Marcelo Ebrard, entre otros.
Entre vivas y gritos de apoyo de asambleístas e invitados, López Obrador dio un mensaje centrado en un llamado a confiar en el proyecto alternativo de nación que fue desglosando punto a punto, entre ellos, los compromisos de respeto a la diversidad sexual y de prensa; y su rechazo a la construcción del muro fronterizo México y Estados Unidos.
COMBATE TOTAL A LA CORRUPCIÓN E IMPUNIDAD
Se comprometió con un combate total de la corrupción y la impunidad, una gestión austera, mejores salarios para los trabajadores del estado y respeto de derechos fundamentales.
Apuntó que se castigaría con rigor a quienes violen derechos humanos, que habría un auténtico Estado de Derecho, y se aplicaría el criterio de que al margen de la ley nada, y por encima de la ley, nadie.
Refrendó su propuesta de realizar una consulta con víctimas de la violencia, principalmente para analizar una eventual amnistía a infractores que opten por su readaptación, si ello ayuda a garantizar la paz social.
“VAMOS A PROMOVER EL DESARROLLO DE MÉXICO”
Definió con qué animo impulsaría su propuesta de gobierno.
“Soy terco, es de dominio público, necio, dicen obcecado, perseverante, o como suele llamarse a quienes defienden ideales, principios, o alguna causa. Con esta misma convicción actuaré como Presidente de la República, con terquedad, con necedad, con perseverancia, rayando en la locura de manera obcecada voy a acabar con la corrupción. Lo mismo con perseverancia, con convicción, con intransigencia vamos a promover el desarrollo de México”, señaló.