Fuerzas del ejército y la policía se enfrentaron el viernes con partidarios del expresidente Evo Morales en una ciudad del centro de Bolivia, dejando un saldo de cinco fallecidos y 26 heridos.
Ello, en un hecho de violencia que intensifica el desafío para el gobierno de la autoproclamada presidenta interina Jeanine Áñez.
Este mortal enfrentamiento profundiza aún más la crisis que vive el país andino desde hace tres semanas generada por protestas contra el presunto fraude en la contienda presidencial del 20 de octubre que Morales dijo haber ganado.
El líder indígena terminó dimitiendo el domingo tras presiones de la policía y militares.
COCALEROS DEL CHAPARE
En la jornada, miles de manifestantes en su mayoría cocaleros del Chapare, reducto del exmandatario, buscaban ingresar a la ciudad de Cochabamba para protestar contra Añez y reclamar el regreso de su líder.
Los choques comenzaron cuando manifestantes trataron de cruzar un puesto militar de control, donde opositores y seguidores de Morales se enfrentaron durante semanas.
Los cocaleros informaron de al menos cinco fallecidos cuando las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra los manifestantes.
DECOMISAN ARMAS Y EXPLOSIVOS
Más tarde el Defensor del Pueblo en esa ciudad, Nelson Cox, confirmó cinco fallecidos por impacto de bala, 26 heridos y 124 detenidos.
La policía informó que a muchos detenidos se les decomisó armas y explosivos.