Diez días más tarde de que se suscitara el supuesto ataque químico del que Estados Unidos y sus aliados han acusado al régimen sirio, los inspectores de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas arribaron a Siria.
Acompañados por el ministro de Salud de Siria, los nueve expertos están esperando el visto bueno de un equipo de evaluación de seguridad de la ONU para comenzar sus investigaciones ya que en 2013 y en 2014 expertos de la OPAQ fueron atacados mientras trataban de hacer su trabajo en Siria.
“Les he informado antes que el Gobierno sirio ha puesto en marcha todas las medidas necesarias para facilitar la llegada de la misión de investigación a Siria. Hoy el equipo de seguridad de la ONU entró a Duma”, dijo el embajador de Siria ante la ONU, Bashar al-Jaafari.
Tras darse a conocer el arribo del equipo de investigadores, el Ejército ruso anunció que encontró un laboratorio rebelde para fabricar armas químicas en Duma.
“Se descubrieron agentes químicos prohibidos por la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas. Entre los que se encontraron había tiodiglicol, dietanolamina, gas mostaza nítrico y sulfúrico. Además de eso, se descubrió una lata de cloro”, reveló Alexander Rodionov, soldado ruso experto en armas químicas.
Los expertos de la OPAQ llegaron a Damasco el sábado, unas cuantas horas después del ataque de Estados Unidos, Francia y Reino Unido y no se les había permitido el traslado a Duma debido a cuestiones de seguridad.
Empero, Francia expresó su preocupación por los obstáculos a la misión de especialistas y señaló que posiblemente Rusia oculte pruebas sobre el ataque químico, acusación que fue rechazada por Moscú.
“Es ridículo lo que hemos oído de París, por ejemplo, hoy. Emitieron un comunicado especial de que Rusia está haciendo algo para no permitir que los inspectores vayan a Duma. Esto es realmente ridículo porque, primero que todo, Rusia fue el país que pidió que los inspectores fueran a Siria, a Duma”, expresó Maria Zhakarova, portavoz del ministerio de relaciones Exteriores de Rusia.
QUÉ BUSCARÁN LOS EXPERTOS
Durante dos o tres días los inspectores recopilarán todas las pruebas posibles, esto incluye entrevistarse con testigos, médicos y víctima además de obtener muestras médicas.
El material obtenido por los inspectores será mandado bajo un estricto protocolo de seguridad al laboratorio de la OPAQ en Holanda. El objetivo de la investigación es confirmar si realmente hubo un ataque químico y qué sustancias fueron usadas, pero no señalará quién fue el responsable del mismo.
En 2013 después de un acuerdo entre Rusia y Estados Unidos, Siria aceptó deshacerse de sus armas químicas, sin embargo, desde entonces se han denunciado numerosos ataques químicos, entre ellos el de Jan Sheijun en abril de 2017 donde se usó gas sarín.