La ciencia se ha dado a la tarea de demostrar que todos nuestros sentimientos son parte de una reacción química. Por lo tanto podríamos pensar que al igual que sucede con la neutralización entre sustancias ácidas y bases, también hay algo que puede contrarrestar el golpe de un amor no correspondido. En efecto, puede que haya un antídoto contra el enamoramiento. Obviamente no se trata de una vacuna o algún tipo de pastilla para dejar de amar, este contraveneno se enfoca en modificar las conductas y hábitos relacionados con esa persona especial.
Enamorarse es un paso esencial en la vida de todo ser humano, no importa a qué edad conozcamos este sentimiento, la mayoría de las veces siempre es grato vivir ese momento. Sin embargo, algunas veces sentir amor por otra persona es una experiencia más que dolorosa. Es posible que una o más veces nos enamoremos de la persona menos indicada. Ésta nos hará la vida miserable por medio de su indiferencia o total desinterés, por lo que nuestras esperanzas se desvanecerán mientras vemos a esa persona alejarse de nuestro lado. Si bien el tiempo cura todas las heridas, lo único que querremos en ese momento será olvidar de inmediato, arrancarnos el dolor… desenamorarnos.
El psicólogo Fredric Neuman firma que la razón principal por la que muchas personas se sienten atraídas emocionalmente, se encuentra en la cercanía que existe entre ellos. Es decir, cuando dos personas pasan mucho tiempo juntos crean lazos de confianza y apego incomparables. Con el tiempo estos vínculos se vuelven más fuertes a medida que las rutinas de ambas partes terminan convirtiéndose en una sola.
Al alcanzar el punto máximo de apego estas dos personas se darán a la tarea de responder a su primitiva naturaleza animal y comenzarán a sentirse atraídos físicamente. Por lo tanto, no hay otra forma de deshacer el nudo que nos ata a alguien, más que desapareciendo el uno para el otro. Sólo así dejaremos de ver en él o ella lo que añoramos con tanta nostalgia, dejaremos de enamorarnos de la idea de seguir juntos.
Lógicamente, lo primero que tenemos que hacer si queremos desenamorarnos de alguien es dejarlo de lado. Por decirlo de alguna manera tenemos que esforzarnos por comenzar una vida nueva, en la cual su existencia no tenga relevancia alguna. Podemos hacer estas modificaciones gradualmente: dejar de verlo, de llamarle o escribirle, deshacernos de todo lo que nos recuerde su compañía y finalmente olvidarlo.
Sin duda, desprendernos de una persona tan importante será una de las partes más difíciles de este proceso; aún así existen varias formas hacerlo más llevadero. Conocer gente nueva es quizás uno de los mejores caminos para dejar de lado a esa persona. Esto no implica que tengamos que relacionarnos con el primero tengamos enfrente, recuerda que lo que queremos es olvidar, no reemplazar. Involucrarnos con caras nuevas nos ayudará a comprender que existen miles de posibilidades en la vida, además de la que en ese momento nos está haciendo sufrir.
También es importante pensar en sus defectos y los aspectos negativos, podemos escribir una lista de todo lo que nos molesta sobre nuestra expareja. Aspectos de higiene, educación y vestimenta; todo lo que alguna vez nos incomodó pero ignoramos con tal de estar a su lado. La intención no es crear odio, se trata de conocernos mejor para descubrir qué es lo que realmente queremos. Sólo así podremos enfocarnos en nosotros y no en alguien que únicamente nos aleja de la soledad.
Cuando por fin conseguimos desbaratar la idea que creamos alrededor de esa persona, nos daremos cuenta de que hay todo un mar de sensaciones cada vez más lejos de un inexistente amor. Quizás algún día podamos entablar una conversación agradable y sin momentos incómodos con nuestro ex, quizá nunca sepamos de él o ella nuevamente. Lo que es seguro es que gracias al esfuerzo que hemos puesto en arrancar esa página de nuestra historia, podremos desenamorarnos para ser felices otra vez. Fuente: Cultura Colectiva