Un conductor en estado de ebriedad en Shandong, al este de China, pudo escapar tras atropellar a un niño y dejar herida a una mujer. El automovilista se horrorizó al descubrir que las víctimas eran su hijo y esposa.
El conductor fue arrestado por la Policía al día siguiente, quien le dijo que había matado a su pequeño hijo.
El sujeto fue filmado con aspecto devastado cuando conoció lo que había hecho.
Los servicios de emergencia llevaron a la esposa e hijo de Zhang a un hospital cercano, pero el niño fue declarado muerto después de que fracasaron los esfuerzos para revivirlo.
Los testigos que se apresuraron a inspeccionar el accidente en el camino informaron haber visto a una mujer y un niño heridos antes de llamar a una ambulancia y a la policía.
El zapato y el scooter de su hijo fueron descubierto después del terrible accidente.
