La policía de Japón arrestó el martes en Osaka a una mujer de 53 años que se dio a la tarea de presentarse espontáneamente para confesar que en los años noventa enterró en baldes de cemento a cuatro de sus hijos recién nacidos.
La mujer señaló a los investigadores que dio a luz a cuatro niños entre 1992 y 1997 y que cada vez ocultó los cuerpos en su domicilio, indicó un portavoz policial.
En el departamento de la mujer, donde vivía con un hijo, la policía halló cuatro cubos llenos de cemento.
El análisis del contenido de los baldes con un escáner pudo revelar la existencia de huesos de bebé en cada uno de ellos, de acuerdo con el diario Asahi Shimbun.
La presunta filicida expuso a los investigadores que pensaba que no iba a poder criarlos y que no tenía a nadie con quien hablar del asunto, dijo el canal de televisión público NHK.
Los investigadores deberá determinar ahora si la mujer mató a los bebés inmediatamente después del nacimiento o si nacieron muertos, indicaron medios locales.
Por ahora se desconocen las razones que llevaron a la mujer a presentarse a la policía el lunes, dos décadas después de los hechos.
Hace tres semanas, el hallazgo de nueve cuerpos humanos descuartizados en un apartamento de un suburbio de Tokio conmocionó a Japón.
Takahiro Shiraishi, 27 años, confesó el asesinato de nueve personas, en su mayoría mujeres de entre 15 y 26 años de edad, a las que decapitó y descuartizó.
El lunes fue inculpado de asesinato por la muerte de una de esas nueve personas. Foto: Doctissimo
