El Congreso de la Ciudad de México aprobó la nueva Ley del Derecho al Acceso, Disposición y Saneamiento del Agua de la Ciudad de México, que establece disposiciones para aprovechar el agua de lluvia.
María Guadalupe Aguilar Solache, presidenta de la Comisión de Gestión Integral del Agua, sostuvo que esta legislación sustituye la Ley de Aguas del Distrito Federal, pues se pretende armonizar el nombre y contenido de la misma con la Constitución de la Ciudad de México.
“El agua es un bien público, social y cultural, es inalienable, inembargable, irrenunciable y esencial para la vida, enfatizó. La gestión del agua será pública y sin fines de lucro”.
APROVECHAR EL LÍQUIDO VITAL
La ley conmina al Sistema de Aguas de la Ciudad de México a procurar instalar equipos para la recolección de aguas pluviales en los edificios públicos de la capital del país.
Además, a procurar su colocación en unidades habitacionales, colonias, barrios y pueblos para que el agua recolectada sea reutilizada en diversos usos no potables, lo que además ayudaría a reducir el riesgo de inundaciones.
Indicó que tanto la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos como la Constitución de la Ciudad de México garantizan el derecho de toda persona al agua para consumo personal y doméstico en forma adecuada, salubre y equitativa.
LOS DATOS DUROS
México recibe un millón 489 mil metros cúbicos de agua por precipitaciones pluviales entre los meses de julio y septiembre, de los cuales sólo seis por ciento se infiltra en forma natural para recarga de los mantos acuíferos.
La legisladora de Morena anotó que México cuenta con reservas estimadas de 471.5 mil millones de metros cúbicos de agua dulce renovable por año.
El dictamen fue enviado al jefe de gobierno de la Ciudad de México para su promulgación y publicación en el Diario Oficial de la Federación y en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México.