Michelle Bolsonaro, próxima primera dama de Brasil, se ha distinguido por su discreción y por evitar pararse ante las cámaras y no usar redes sociales.
Luego d la victoria de su esposo, Jair Bolsonaro, elegido este domingo como el nuevo presidente de Brasil con más del 55% de los votos, la convierte en coprotagonista de la nueva política de ese país.
De acuerdo con la prensa brasileña, Michelle de Paula tiene 36 años de edad y conoció a Jair Bolsonaro, de 63, en 2007, cuando ella trabajaba en el Congreso de Brasil como secretaria parlamentaria y él era diputado triplicando su salario, pero dejó el puesto por la prohibición del Supremo Tribunal Federal que no permite el nepotismo en la administración pública.
“Nos conocimos, nos enamoramos y nos casamos a los cinco meses”, dijo este domingo a la televisora local Record TV, dijo Michelle sobre su enlace nupcial en su primera entrevista para la televisión.
Michelle es madre de una joven de 16 años, y ha procreado con Bolsonaro otra niña que ahora tiene 7 años de edad. Nacida en Ceilandia, un zona pobre del Distrito Federal de Brasil. Sus apariciones en mítines y actos de campaña fueron escasas, siempre estuvo acompañada de su marido.
Desde el 1º de enero Michelle será primera dama es una miembro activa de la Iglesia Bautista Atitude, donde colabora fundamentalmente educando niños con deficiencias auditivas.
