Se podría asegurar categóricamente que el 2018 es el año en el que por fin las prendas sofisticadas y las casuales han hallado una auténtica simbiosis. Americanas con mallas de ciclista, vestidos lenceros con chaquetas vaqueras, trajes con zapatillas (o, en realidad, cualquier cosa con zapatillas). La verdad es que ya no hay ninguna combinación que se le resista al street style, no obstante, todavía sigue habiendo ciertos códigos estéticos que tienen más sentido y funcionan mejor que otros.
Este otoño/invierno 2018 es también el de la reinvención del look de working girl, así que no es de extrañar que éste sea uno de los looks que más alternativas diferentes -con tintes casual- está admitiendo. Si en 1988 nos sorprendía ver a Melanie Griffith en Armas de mujer con su traje de oficina y sus sneakers, en 2018 es un estilismo completamente habitual del street style y de muchas oficinas del mundo. Sin embargo, como decíamos antes, no todo vale, y hay combinaciones que, por uno u otro motivo, terminan siendo las más vistas.
Dicho esto, es preciso hacer hincapié en otra de las tendencias estrella de la temporada, las zapatillas chunky. Nada que ver con las más clásicas Converse, Superga o Vans, de líneas más pulidas. Este año las sneakers llegan en su versión más robusta o ‘colosal’, como las definía Patricia Moreno, redactora de moda de Vogue.es, por lo que nos encontramos ante uno de los zapatos preferidos de lo que en los años 90s llamaríamos bakalas, y que hoy se han convertido en lo más cool en materia de calzado.
Esta revisión del estilo bakala se ha juntado en el tiempo con la reinvención de la working girl, de modo que son las chunky son las zapatillas que han conquistado a los trajes de chaqueta. Y mientras los de pantalón quizá admitan más variaciones, los que incluyen una falda tienen una firma claramente favorita: Fila. Son, efectivamente, bastante robustas, pero en sus versiones pastel pueden considerarse incluso femeninas, en el sentido más clásico de la palabra. Con un traje de chaqueta y falda (si es por encima de la rodilla, mejor) crean un combo tan inesperado como estético, gracias al equilibrio entre la seriedad de las prendas y los aires de rebeldía de lassneakers, que además, gracias a lo anchas que son, ayudan a alargar y estilizar visualmente la pierna. Las Fila no son las únicas chunky que hay, pero sí que se han erigido esta temporada como una de las firmas de zapatillas -recuperadas de nuestra infancia- de mayor calado en la calle. Fuente: https://www.vogue.es