Delbert Latham y su hijo Kaysen fueron al parque Wonderland Park en Texas, donde decidieron probar una montaña rusa apta para pequeños, llamada Mousertrap.
Mientras comenzaba el juego, el papá decidió grabar el paseo. En la primera bajada se ve como el niño de repente desaparece de la cámara, pues su cinturón de seguridad se soltó y su padre tuvo que recogerlo para que no cayera.
CUANDO BAJÓ DEL JUEGO, DELBERT COMUNICÓ EL INCIDENTE AL STAFF DE LA ATRACCIÓN
Éstos le comentaron que era ‘algo que pasaba algunas veces’, y continuaron con el juego abierto y permitiendo a la gente subir a pesar de la poca seguridad.
Días más tarde el parque lanzó un comunicado y afirmó que el carro dañado ya había sido removido.
