Michael Rotondo, de 30 años de edad, fue demandado por sus padres a causa que aún no se ha ido de su casa, localizada Syracuse, al norte de Nueva York.
Según los medios locales, los padres acudieron a la corte con la esperanza de que el hombre sea forzado a mudarse.
Sin embargo, Michael alegó que no se le dio suficiente tiempo para abandonar la vivienda, por lo que calificó como represalia a la acción de sus progenitores.
Por su parte, éstos afirman que le han dado cinco avisos por escrito en los que le explican que debe salir de su casa y comenzar su vida como adulto independiente. Incluso le han ofrecido ayuda para hacerlo.
Según los documentos del tribunal, Michael no contribuye a los gastos de la casa ni ayuda con el quehacer doméstico.
Se espera la comparecencia de la familia a finales de este mes.