Los adictos al sexo no suelen establecer vínculos afectivos ni íntimos con sus parejas; la adicción es progresiva y la clave para superarla es aceptar el problema y buscar ayuda.
La adicción sexual se muestra de diferentes formas: adicción a la industria del sexo, a la pornografía, a las relaciones sexuales con desconocidos, a tener varias aventuras simultáneas, a la masturbación compulsiva, al exhibicionismo, al voyeurismo, a las citas obsesivas, al cibersexo, al acoso e incluso al abuso sexual.
Se estima que más de la mitad de los adictos al sexo termina cometiendo algún tipo de delito sexual. Además, con el uso de Internet, a los enfermos les resulta más sencillo llevar una vida sexual secreta e ilícita.
CAUSAS
Un adicto al sexo se define como una persona incapaz de controlar sus impulsos sexuales y que puede llegar muy lejos para satisfacerlos, sin importarle las consecuencias.
Esto significa que algunas personas consumen sus vidas buscando la adrenalina que les produce la actividad sexual, incluso si llevan varios años de relación con su pareja.
SÍNTOMAS
Los síntomas conductuales de la adicción pueden incluir: arreglarse y coquetear de forma exagerada, buscar contactos sexuales inapropiados y utilizar el sexo a cambio de dinero o de poder. Quienes sufren la adicción suelen obsesionarse pensando en cómo y cuándo van a tener sexo, situación que interfiere en sus vidas personales y laborales, pues los angustia no satisfacer sus deseos.
CAUSAS COMUNES
Los médicos no saben por qué unas personas son más propensas a la adicción que otras, pero hay determinados factores que tienden a coincidir en todos los adictos al sexo. Muchos sufrieron abusos sexuales en la infancia, lo que les ha llevado a construir modelos poco saludables para el amor y el placer; también suelen proceder de familias disfuncionales.
Además es probable que los adictos al sexo manifiesten conductas parecidas en otras áreas de sus vidas; pueden ser adictos al alcohol o a las drogas, o sufrir trastornos alimentarios. Al igual es posible que haya otros adictos en sus familias, lo que sugiere que la adicción no solo es un problema emocional, sino que está determinado por factores genéticos. Se considera que la adicción al sexo puede estar asociada con otros trastornos psicológicos o de la personalidad, como el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) y la depresión.
MUJERES ADICTAS
También conocidas como “adictas al amor” ya que su conducta no busca necesariamente el rush orgásmico, sino la euforia de un nuevo romance o el encaprichamiento de un nuevo encuentro sexual.