Las altas temperaturas que se han producido en ciertas partes de Irlanda, al oeste de Inglaterra, causaron un siniestro forestal que dejó al descubierto un mensaje que había permanecido oculto desde la década de los cuarenta.
Se trata de un gran mensaje hecho con piedras recubiertas de cal, en el que se lee el término “Eire“, que en la lengua originaria de la isla, significa “Irlanda”.
El mensaje había sido hecho para evitar que los pilotos alemanes o Aliados bombardearan este país debido a su cercanía con el Reino Unido (Irlanda del Norte, Gales, Escocia e Inglaterra), uno de los principales objetivos de la Fuerza Aérea de la Alemania Nazi, la Luftwaffe.
Gracias a que Irlanda fue un país neutral durante la Segunda Guerra Mundial, el gobierno pagó grandes cantidades de dinero para colocar mensajes como el recién descubierto a lo largo de la costa irlandesa, con el fin de asegurarse de que ninguna bomba cayera dentro de su territorio.
Al final del conflicto, la mayoría de los mensajes fue borrado, menos uno, el que un incendio forestal descubrió recientemente.
En internet hay un mapa que muestra exactamente dónde estaban los mensajes que se habían colocado para evitar sufrir un destino similar al de algunas de las principales ciudades inglesas durante el conflicto global contra Japón, Alemania e Italia.