Una de las cosas más difíciles es conocer cuándo un aguacate se encuentra lo suficiente maduro como para poder comerlo. Desde que tengo memoria, cuando acompañaba a mi abuela al mercado siempre la escuchaba decir “deme dos aguacates para el miércoles” y entonces el verdulero procedía –con maestría– a despachar el aguacate, el cual efectivamente estaba en su mejor momento para el miércoles.
Desafortunadamente, muchas veces, si no tienes dominio del aguacate, cuando lo quieres comer puede que se encuentre echado a perder con ese color negruzco que caracteriza a su putrefacción. Pero eso parece estar terminandose. Por suerte, la startup californiana Apeel Sciencies creó un recubrimiento orgánico que le permite al aguacate conservarse en buen estado.
Se trata de una segunda piel del aguacate que está hecha a partir de cutina. Un polímero de ácaidos grasos que evita que las plantas pierdan agua o el dióxido de carbono necesario para vivir.
El principio con los aguacates, entonces, es el mismo, la fruta absorbe menos oxígeno desacelerando su oxidación y permitiendo que se conserve más tiempo.
Apeel Sciences está haciendo pruebas con otras frutas y verduras como mangos, espárragos, plátanos y ejotes.
Los primeros aguacates cubiertos se venderán, de momento, en dos tiendas de mayoreo de Estados Unidos y costarán casi 20 pesos cada uno. Lo cierto es que se trata de un precio elevado y desconocemos si estos aguacates lleguen a venderse en nuestro país, pero de momento parece que se trata de una alternativa verde bastante interesante.
