El sacerdote Francisco Javier “B”, vinculado a proceso por el homicidio del diácono Hugo Leonardo Avendaño, fue despedido por decenas de feligreses con oraciones y gritos para manifestar apoyo a su líder religioso.
No obstante, el ánimo de sus seguidores se vino abajo al enterarse de que el clérigo enfrentará proceso penal, como sospechoso del referido crimen ocurrido en las primeras horas del 12 de junio.
Al notar la salida de una camioneta de traslados de la Policía Procesal, los seguidores del rector de la Parroquia Cristo Salvador, externaron su respaldo, sin que realmente el vehículo llevara al imputado.
CENTRO DE ORACIÓN
Las inmediaciones del Tribunal Superior de Justicia de la ciudad de México (TSJ-CDMX), se convirtieron en un centro de oración; en la calle, las casi siete horas de audiencia, no tuvieron pausa y sólo se escucharon rezos y palabras de apoyo al prelado.
Una vez que el juez de control lo vinculó a proceso, el imputado fue trasladado con estricta vigilancia al Reclusorio Oriente, donde pasará su sexta noche, después de su aprehensión.
La razón de su encierro los tres meses que durara la investigación complementaria, obedece a que el juez ratificó la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa, reporta mvsnoticias.com