Joseph James DeAngelo, de 72 años, el presunto autor de 12 homicidios en serie y 45 violaciones que hace 40 años conmocionaron a California (EE.UU.), declaró antier por primera vez ante un tribunal desde su arresto la semana pasada en Sacramento, la capital del estado.
DeAngelo, que se presentó en silla de ruedas, portaba un uniforme de color naranja y pareció confundido mientras el Juez Michael W. Sweet leyó las acusaciones.
En la comparecencia, de pocos minutos de duración, la corte se dio a la tarea de otorgar un defensor público al anciano que actualmente enfrenta ocho cargos de asesinato en tres tribunales diferentes del Estado Dorado.
La Fiscalía de Sacramento interpuso el pasado viernes dos cargos formales contra de DeAngelo por la muerte del sargento Brian Maggiore y su esposa Katie, ocurrida el 2 de febrero de 1978 en la ciudad de Rancho Cordova, en Sacramento.
Si bien el sospechoso está vinculado con una serie de crímenes que comenzaron en 1976 con robos y asaltos sexuales en Sacramento, el asesinato de la pareja, que paseaba a su perro cuando fue emboscada, inauguró una estela de sangre por todo el Estado que terminó en 1986 al Sur de California, en el Condado Orange.
Anne Marie Schubert, fiscal de distrito de Sacramento, explicó que no planea presentar cargos por las docenas de violaciones que su oficina cree que DeAngelo cometió en su jurisdicción a fines de 1970, argumentando que el “estatuto de limitaciones” ha expirado.
No obstante, el fiscal del Condado Yolo, Jeff Reisig, se dio a la tarea de advertir que su oficina podría presentar cargos por tres violaciones sexuales que ocurrieron en la zona en el verano de 1978.
Un año después, supuestamente el encartado se desplazó hacia el Condado Santa Barbara, donde atacó a una pareja en su casa. Las víctimas sobrevivieron.
Dos meses más tarde este suceso, Robert Offerman y Alexandria Manning fueron asesinados en su condominio cerca de Goleta. En la misma área, muestras de ADN relacionaron al asesino con la muerte de Greg Sánchez, de 27 años, y Cheri Domingo, de 35, en julio de 1981.
La procuradora Joyce E. Dudley todavía espera para presentar la acusación contra el sospechoso por los cuatro homicidios.
DeAngelo también hace frente cargos de asesinato en el Condado Ventura. El procurador Gregory D. Totten presentó las acusaciones por la muerte y violación y robo de Charlene Smith y su esposo Lyman en 1980. Un amante de la víctima fue el primer sospechoso de los asesinatos, aunque años más tarde las pruebas vincularon los homicidios con los crímenes anteriores.
Las autoridades del Condado Orange también esperan a DeAngelo para que responda por cuatro asesinatos.
El ex policía fue acusado hace dos días de cuatro cargos de homicidio bajo circunstancias especiales, que incluyen violación y sodomía. También enfrenta cargos por robo.
Los fiscales están estudiando si trasladan el juicio a Sacramento, aunque la mayoría de asesinatos ocurrieron en el sur de California.
Schubert comentó a los medios que “tiene sentido hacerlo en un (solo) condado”, aunque añadió que lo importante es que “todos participen”, dijo.
En el Condado Ventura, la fiscalía ha dicho que buscará la pena de muerte.
Los crímenes en los que se vinculan a DeAngelo se detuvieron en 1986.
Tras décadas de investigaciones, la pesquisa decidió utilizar un nuevo recurso y se concentró en escudriñar el banco de ADN de dos compañías “on line” que ofrecen servicios de genealogía.
Los investigadores explicaron que se comparó la muestra de ADN recolectada en las escenas de crimen con las bases de datos, hasta hallar una pista que los condujo hasta el presunto asesino, que fue policía durante la década de 1970, por lo que pudo cometer algunos de sus crímenes mientras formaba parte de las fuerzas de seguridad.
El fiscal Steve Grippi expuso al periódico Sacramento Bee que, al comparar la muestra genética de ADN recolectada en las escenas de los crímenes con las bases de datos, los investigadores pudieron hallar un familiar que compartía los datos genéticos del asesino.
La detención de DeAngelo ocurrió el martes 24 de abril en la ciudad de Citrus Heights, un vecindario de clase media y tranquilo donde el sospechoso había vivido más de tres décadas.
El juez Sweet fijó la nueva audiencia para el próximo 14 de mayo en la corte de Sacramento.