La militar miembro de la Guardia Nacional Aérea, nacida en Rusia, fue ultimada a golpes, y sus hijos pequeños se ahogaron en su casa de Staten Island el sábado por la mañana.
Así fue que acabó el Sueño Americano de Alla Ausheva, de 36 años, cuyo esposo, Shane Walker, de 36 años, es el presunto responsable de los homicidios e intentó suicidarse desde el puente Verrazano.
El New York Post dio a conocer que Ausheva se naturalizó como estadounidense hace siete años y recibió la bienvenida del presidente Barack Obama, en una ceremonia en la Casa Blanca.
Walker, quien también forma parte de la Fuerza Aérea, fue visto en un clip que arribó a la casa de de la familia de dos pisos y entró en su auto, aparentemente ebrio, poco después de la masacre, dijeron fuentes policiales.
Ahora se presume que mató a su novia, Alla Ausheva, y a sus hijos, Ivan, de 2 y Elia, a 3. Ella fue encontrada boca abajo en una cama con trauma severo en la cara y la cabeza.
Los niños parecían haberse ahogado en la bañera, dijeron las fuentes al Post.
La pareja estaba desplegada en el campo militar de Fort Hamilton de Brooklyn.
“Era una persona hermosa”, dijo un perturbado amigo sobre ella, a quien los vecinos la recordaban esperando un autobús expreso, a veces con uniforme, dijeron los vecinos.
Los oficiales lo llevaron al Centro Médico Maimonides para su evaluación.
Tres horas más tarde el cuerpo de Ausheva fue descubierto por uno de los supervisores de Ausheva, quien recibió un reporte de que algo ocurría en su vivienda.
“Es una tragedia. Ella no se lo merecía. Sinceramente, no hay palabras”, dijo sin querer proporcionar su nombre.
Fuente: eldiariony.com