Los deleznables actos del expolicía Derek Chauvin, quien mató al afroamericano George Floyd durante un arresto, le pasan factura pues además de ser acusado formalmente por asesinato en tercer grado, ahora también tendrá que pasar por un divorcio.
Según información de TMZ, la aún esposa de Chauvin, Kellie, ha solicitado el divorcio, tras 10 años de casados.
Kellie, quien nació en Laos y fue coronada Sra. Minnesota en 2018, dice que está devastada por la muerte de George Floyd.
Fotos: adnoticias.mx y Twitter