Mientras una ambulancia llevaba a una bebé de tres meses, Rojin junto a su madre por la autopista de Silivri, Estambul, en Turquía, el vehículo empezó a arder en llamas luego de la explosión de un tanque de oxígeno, de la cual aún no se sabe la causa.
Los paramédicos y la madre lograron escapar de la ambulancia en llamas, pero la pequeña Rojin quedó dentro quemándose viva, la madre al verla quemarse sufrió una crisis nerviosa por lo que tuvieron que sedarla y llevarla a un hospital cercano para que recibiera tratamiento.
De repente, algo pasó y el fuego estalló en la parte posterior. Los paramédicos salieron corriendo de la ambulancia. Los paramédicos no pudieron entrar a salvar a mi bebé y se alejaron. Había tres personas con mi hija, pero cuando el fuego inició no había nadie”, relató la mujer.
Fuente: Tribuna
