En Francia, los alumnos de primaria y secundaria regresaron este lunes a clase de forma obligatoria hasta las vacaciones de verano, dentro de dos semanas, para restablecer el contacto con todos los niños.
No se puede dejar a los alumnos sin clase de marzo a septiembre, indicó Jean-Michel Blanquer, ministro de Educación, que se ha marcado el objetivo de que en las dos próximas semanas los 6,7 millones de estudiantes de primaria y los 3.3 millones de secundaria asistan de forma presencial.
Para ello, se ha flexibilizado mucho el estricto protocolo sanitario establecido al comienzo de la desescalada en mayo, de forma que en preescolar ya no se exige ninguna regla de distanciamiento entre niños de la misma clase.
USO DE CUBREBOCAS
En el resto de cursos desaparece la regla que preveía un espacio de 4 metros cuadrados por cada uno y un máximo de 15 estudiantes por clase.
A partir de ahora basta con una distancia lateral de un metro en las aulas.
Sí se mantiene la obligatoriedad de mascarilla para los estudiantes de más de 11 años (y de los profesores).