EU y su perversa estrategia para acorralar a Putin

 

Mario Lettieri y Paolo Raimondi en MSIA INFORMA

Este mes habrá elecciones en Rusia y en Italia. En Moscú las cosas están bastante claras, más no así en Roma: la reelección de Putin para un período más al frente de la Federación Rusa es prácticamente un hecho.

 

Pero, después de los movimientos de los dos grandes jugadores mundiales en el Foro de Davos, sobre el comercio internacional, el proteccionismo y los futuros escenarios financieros globales, la situación de Rusia merece un examen más cuidadoso que el proporcionado por los habituales argumentos ideológicos y mediáticos.

 

Existe en el país una llamada ala liberal, mejor dicho, liberalista, encabezada por el ex-ministro de Finanzas Alexei Kudrin, centrada en las sanciones económicas votadas por el Congreso de EUA en julio pasado, para minar la postura de Putin. Recuérdese que el aspecto más relevante de las sanciones es el financiero, el cual entrará en vigor antes de las elecciones.

 

Después de la orden presidencial de Donald Trump, el Departamento del Tesoro estadounidense elaboró un “Informe sobre el Kremlin”, enlistando a más de 200 altos funcionarios y empresarios rusos como factibles de sufrir sanciones.

 

El Tesoro tiene el poder de bloquear y secuestrar fondos detenidos por los grandes magnates rusos, los que se calculan en cerca de un billón de dólares. Las sanciones están muy focalizadas en personajes bien determinados y en ciertos sectores económicos.

 

ÉLITE RUSA RESULTA AFECTADA

La idea de intimidarlos con la amenaza de una aprehensión de sus bienes, con el objetivo de llevarlos a alejarse de Putin y Rusia, es parte de una estrategia para acorralar al presidente ruso, aislarlo de los poseedores del poder económico y derrotarlo políticamente.

 

Por otro lado, como reacción a las sanciones económicas, surgió un movimiento llamado Ryuk (Reinicio) con el objetivo de repatriar de varias maneras el dinero ruso dejado en bancos internacionales o paraísos fiscales. Aparentemente, el movimiento tiene el apoyo de Putin y de muchos altos ejecutivos de grandes corporaciones rusas público-privadas.

 

Los líderes políticos del movimiento son miembros del partido Rusia Unida –partido de Putin- como el diputado de la Duma, Denis Kravchenko. Entre los mentores del movimiento están economistas e intelectuales como los profesores Yuri Gromiko y Yuri Krupnov, creadores del gran proyecto de desarrollo de infraestructura euroasiática conocido como “Razvitie” (Desarrollo), el equivalente ruso de la Iniciativa Franja y Ruta, el vasto programa chino de infraestructura transcontinental.

 

Por desgracia, las sanciones contra Rusia están perjudicando la seguridad económica, y, por ende, la tolerancia con los evasores fiscales. La élite rusa también es afectada por esto.

 

MOVIMIENTO REINICIO

El movimiento “Reinicio” incluye un ultimátum a los que tienen cargos en el poder: o repatrian los recursos depositados en los paraísos fiscales para invertirlos productivamente en la economía o dejan sus puestos. El movimiento también exige penas de prisión para aquellos que, ilegalmente y contra los intereses del país, quieran seguir manteniendo o mandando dinero hacia el exterior. Además, pretende un correctivo del proceso de privatización de las industrias estatales del período de Boris Yeltsin (1992-99).

 

Para acelerar el retorno de los capitales, estos serían depositados transitoriamente en bancos suizos, con la condición de ser transformados en fondos de inversión y desarrollo destinados hacia la economía rusa. Estos fondos deben financiar “Project bonds” (títulos vinculados a proyectos) para inversiones en diversos sectores productivos rusos, con la exclusión del petróleo y el gas.

 

Es decir, las sanciones financieras contra la Federación Rusa están provocando un “efecto boomerang” no previsto por los que las establecieron.

Noticias relacionadas

Comenta