El gobernador de Florida, Rick Scott, demandó la renuncia del director del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), Christopher Wray, poco después de que éste reconociera que la agencia dejó pasar una alerta sobre un joven obsesionado con las armas y sus intenciones de cometer una matanza en una escuela.
“El fracaso del FBI para tomar medidas contra este asesino es inaceptable (…) El director del FBI debe renunciar”, subrayó Scott.
NO ATENDIERON DENUNCIA
El fiscal general de EU, Jeff Sessions, ordenó una revisión de los procesos del departamento. Gray reconoció que el FBI no hizo nada para investigar la denuncia, un grave error por el cual ha pedido disculpas en un comunicado.
Scott dijo: “una disculpa nunca devolverá la vida a estos 17 floridanos ni consolará a las familias que están sufriendo”, en referencia a las víctimas mortales del tiroteo perpetrado por Cruz.
El senador Marco Rubio se sumó a las críticas, exhortando al Congreso a investigar los protocolos del FBI ante las denuncias del público acerca de potenciales asesinos, “es inexcusable”, exclamó.
CONGRESO DEBE INVESTIGAR SOBRE MASACRE EN SECUNDARIA
En un comunicado, Rubio señaló que el Congreso debería iniciar sus propias investigaciones sobre la masacre ocurrida el pasado miércoles en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland.
Por su parte, Jeff Sessions, fiscal general de Estados Unidos, expresó: “Es claro en estos momentos que las señales de advertencia estaban ahí y los avisos al FBI fueron desaprovechados. Vemos las consecuencias trágicas de esos fallos”.